Hoy, 11 de julio de 2024, se cumplen 53 años desde la histórica nacionalización del cobre en Chile, un hito que marcó un antes y un después en nuestra historia económica y social. Esta fecha nos invita a reflexionar sobre el legado de aquella decisión llevada a cabo durante el gobierno de la Unidad Popular, encabezada por el Presidente Salvador Allende, y a analizar los desafíos que enfrentamos en la actualidad. Asimismo, recordamos con dolor y respeto a todas y todos quienes perdieron la vida en los años oscuros de la dictadura civil-militar que siguió a esta época de cambios y transformaciones.
Un Legado de Soberanía y Lucha
La nacionalización del cobre en 1971, durante el gobierno de Salvador Allende, representó un acto de soberanía y justicia social, devolviendo a Chile el control sobre sus recursos naturales más valiosos. Dicho acto fue un reconocimiento del derecho del pueblo chileno a beneficiarse directamente de su riqueza mineral, impulsando el desarrollo económico y mejorando la calidad de vida de millones de chilenas y chilenos.
Sin embargo, solo dos años después, el golpe civil-militar de septiembre de 1973 truncó el Gobierno Popular, sumiendo a Chile en una dictadura que dejó un legado de represión, tortura, asesinatos, desapariciones y exilio, entre tantas y tantas aberraciones más. En este contexto, es fundamental recordar y honrar a los mártires de esa época, muchas veces olvidados, y denunciar también que muchos culpables aún siguen impunes.
Entre los valientes que perdieron la vida, recordamos a David Silverman, Gerente General de Chuquicamata; a Ricardo García, Gerente General de El Salvador; y a Benito Tapia, obrero y dirigente sindical de El Salvador. Su sacrificio y lucha por la justicia y dignidad no deben ser olvidados jamás.
El retroceso y la entrega del cobre.
Es impactante que, durante la dictadura civil-militar, el cobre permaneciera en manos del Estado, para luego ser entregado progresivamente a las grandes transnacionales durante los gobiernos democráticos que siguieron. Los gobiernos de Patricio Aylwin, Eduardo Frei Ruiz-Tagle y Ricardo Lagos, entre 1990 y 2005, implementaron el concepto de “Concesión Plena”, ideado en la dictadura por José Piñera, Ministro de Minería de Pinochet.
Actualmente, solo entre el 27% y 28% de la producción de cobre está a cargo de Codelco, mientras que más del 70% se encuentra en manos de empresas extranjeras. Esto contrasta de manera muy triste con el espíritu de la reforma constitucional que permitió la nacionalización del cobre en 1971, que establecía que “el Estado tiene el dominio absoluto, exclusivo, inalienable e imprescriptible de todas las minas”.
El cobre sigue siendo la principal riqueza básica de Chile, representando aproximadamente el 60% de nuestras exportaciones y el 30% de las reservas mundiales. Además del cobre, otros subproductos valiosos como la plata, el oro, el molibdeno y las llamadas tierras raras (lantano, cerio, neodimio, europio, iterbio y lutecio, entre otros) son elementos imprescindibles para las tecnologías actuales, que se venden por lejos más caras que el cobre y se explotan en nuestro suelo beneficiando principalmente a capitalistas extranjeros.
Propuestas y llamado a la acción.
Si bien la aprobación del royalty minero en 2023 representa un avance significativo, no es suficiente. El “Sueldo de Chile”, como lo llamó el Presidente mártir, Salvador Allende, debe ser cobrado por Chile y es imperativo avanzar hacia la renacionalización del cobre, no solo por razones económicas, sino también por soberanía y dignidad.
Como organización nacional representativa de las trabajadoras y trabajadores contratistas y subcontratistas del cobre en Chile, desde nuestra fundación hemos levantado, entre otras, la bandera por la recuperación de nuestros recursos naturales estratégicos, principalmente el cobre, pero también el litio, el agua y otros. Sobre el cobre, que es la principal riqueza de nuestro país, planteamos y proponemos lo siguiente:
- Renacionalización del Cobre: recuperar el control estatal sobre la totalidad de la producción de cobre y sus subproductos, asegurando que las ganancias beneficien directamente al pueblo chileno;
- Transparencia y Gestión Eficiente: implementar políticas de transparencia y rendición de cuentas en la gestión de Codelco y otras entidades estatales, garantizando el uso eficiente y ético de nuestros recursos;
- Inversión en Tecnología y Sustentabilidad: fomentar la investigación y desarrollo de tecnologías que optimicen la extracción y procesamiento del cobre de manera sustentable, minimizando el impacto ambiental y generando valor agregado;
- Diversificación Económica: promover la diversificación de nuestra economía, reduciendo la dependencia del cobre y desarrollando otros sectores productivos que generen empleo y bienestar;
- Educación y Capacitación: invertir en la formación de profesionales y técnicos especializados en minería y gestión de recursos naturales, fortaleciendo la capacidad de nuestra fuerza laboral.
En este aniversario, número 53 de la gran gesta por nuestra soberanía, hacemos un llamado a todos los sectores de la sociedad chilena a unirse en un esfuerzo conjunto para preservar y potenciar el legado de la nacionalización del cobre. Es responsabilidad de todos los líderes, sean políticos, empresarios, trabajadores y ciudadanos, asegurar que la riqueza de nuestro país beneficie a todos y no solo a unos pocos, donde el fortalecimiento de políticas públicas en torno a mejorar la salud, vivienda, educación y pensiones sea realmente una prioridad. Además, y para también robustecer la democracia y distribución de la riqueza en nuestro país, se debe avanzar decididamente hacia la Negociación Ramal y el establecimiento de un Salario Vital que esté por sobre la línea de la pobreza.
El cobre es y debe seguir siendo el patrimonio de todas y todos los chilenos. Renacionalizar el cobre es una necesidad urgente y un acto de justicia histórica. ¡Que este aniversario nos inspire a luchar por un Chile más soberano, justo y próspero! ¡Todas y todos a renacionalizar el cobre!
Ana Lamas Aguirre, Presidenta de la Confederación de Trabajadores del Cobre (CTC-Chile).
